Y mi piel reconoce Su Mano, la que me ata y me desnuda… sin perder mi orgullo y mi rebeldía, porque es con Él con quien ceder no es menos. Es ser más porque cedo ante mi elección para ser más grande como Mujer. Y así decido, así comulgo, así me convierto en Suya, venerándoLe como Mi Señor, Mon Monsieur, Dominante y Hombre que me inspira cada día más…
Azul de Magdalia
La elección siempre es mutua porque ambas partes se dan.
ResponderEliminarBeso dulce Mi Estimada Magda.
Y ambas se reciben.
EliminarMi beso, Mi Estimado Dulce.
Es que esas alas, como aquellos antiguos mágicos arcones, reconocen el toque de la mano que les hace alzar el vuelo.
ResponderEliminarBesisssssssss.
Toda la razón, Almi.
Eliminary una vez emprendido el vuelo, deseas seguir volando...
Un beso.